Por: ♥Anaitat♥
Kenny Ortega, el director de la gira 'This Is It', tenía el convencimiento de que a Michael Jackson había que hacerle un examen mental por sus constantes delirios y su actitud extravagante. Así se lo dejó saber a Randy Phillips, uno de los altos ejecutivos de AEG, la promotora de conciertos contra la que Katherine Jackson y dos de sus nietos han interpuesto una demanda por negligencia en el caso de la muerte del rey del pop.
Ese mensaje de Kenny Ortega no sólo llama la atención por haberse escrito seis días antes de la muerte de Jackson, sino por partir de uno de los hombres de confianza del cantante, Ortega, que se encargó de dirigir el documental sobre los últimos días de Jackson y sus ensayos antes de los conciertos en el 02 Arena de Londres. Esta es parte de la evidencia que vio la luz hoy en el juicio por la muerte de la leyenda musical.
Ortega siempre se declaró en sintonía con Jackson y preocupado por su estado de salud, aunque nunca llegó a expresar su temor de que el intérprete de 'Thriller' tuviera algún tipo de problema mental. Sin embargo, Philiips logró calmar la "histeria" de Ortega tras una reunión con 'Jackson' y su médico personal, Conrad Murray, el hombre condenado a cuatro años de prisión por homicidio involuntario.
En esa reunión, Murray le pidió a Ortega que dejase de ejercer de "médico amateur" y que se metiera en sus asuntos, después de aclarar que si cancelaban los conciertos, iba a ser en detrimento de la salud de Jackson.
Después, el cantante de 'Man in the Mirror' dejó claro que estaba listo para el primer concierto en Londres —previsto para el verano de 2009—, que se sabía los bailes de memorias tras llevar años practicándolos y que estuvieran tranquilos sobre su estado de salud. "Michael tenía un aspecto estupendo", dijo Philips a sus colegas al día siguiente al informar sobre la reunión. "El doctor Murray se reafirmó en su forma de ver la situación, Kenny (Ortega) volvió a subirse al barco con confianza y Michael (Jackson) parecía estar bien".
Unos días más tarde, tras el ensayo del 24 de junio, 'Jacko' se encontró con Phillips y le rodeó con su brazo para decirle que si le había llevado tan lejos, ahora podía asumir el testigo y hacer que la gira funcionase. "¿Cómo te sientes?", le preguntó el ejecutivo. "Como un millón de dólares", le respondió Jackson.
Al día siguiente, una inyección letal de Propofol acabó con su vida y con sus ilusiones de volver a brillar sobre un escenario.
FUENTES: http://www.elmundo.es/america/2013/06/14/estados_unidos/1371238063.html