Por: ♥Anaitat♥Twittear
'Michael quería que su legado fuera que la gente entendiera la difícil situación de los niños, el dolor de la negligencia en la infancia', dice Rabbi Shmuley Boteach, quien fue el consejero espiritual de Jackson hasta que la estrella pop terminó su relación en 2001.
Michael Jackson lo logró.
La estrella del pop, que murió hace tres años, fue un “artista innovador, un paquete completo a la manera que lo fueron los Beatles y Elvis”, dice Ashley Dos Santos, una experta en cultura pop y experta en mercadeo de la firma de relaciones públicas Crosby-Volmer International.
Ella elogia los éxitos del cantante –artista espectacular, pionero de los videos musicales- y confía en que un santuario de Jackson, como Graceland de Presley, eventualmente se hará realidad, con su legado siendo el placer de su música y sus presentaciones.
En vida, Michael Jackson era quienquiera que uno quería que fuera: humanitario, artista mediático, Rey del Pop. O: violador infantil acusado. Vieja gloria. Monstruo de talla mundial.
Con razón su legado es tan confuso. ¿Es acaso sobre la compasión? ¿Sobre el talento? ¿Sobre el dinero? ¿O sobre el circo oscuro que lo rodeó todo el tiempoo?
“Creo que cuando hablas de Michael Jackson y tratas de analizarlo, es como analizar le electricidad, ¿sabes? Existe, pero no tienes ni la más remota idea de cómo funciona”, le dijo a CNN J. Randy Taraborelli, biógrafo de Jackson
Tal vez es demasiado pronto. “Todavía estoy de luto”, le dijo a CNN Jermaine Jackson, un hermano.
Tal vez hay todavía muchas cosas que resolver. Neverland todavía está en el limbo, las relaciones familiares aún son tensas y el caso del doctor de Jackson, Conrad Murray, todavía está en proceso.
Y tal vez Michael Jackson siga siendo muy complejo. “¿Me contradigo? / Muy bien, entonces me contradigo / (yo soy grande, yo contengo multitudes)”, escribió Walt Whitman en Canción para mí mismo, y Jackson encaja en ese pasaje a cabalidad.
Boteach (el consejero espiritual), que admite sentirse decepcionado por la pérdida de la amistad de Jackson, todavía está desilusionado porque la estrella pop no trabajó más por las cosas que eran más grandes que él.
Boteach señala que John Lennon, a pesar de su vida pública que incluyó divorcio, cinismo y varios excesos de estrella del rock, todavía hoy es recordado por sus esperanzas por la paz y es conmemorado en una parte del Central Park en Nueva York llamado Strawberry Fields.
“Eso es una vida exitosa”, dice Boteach. “Entendimos que aparte de ser muy falible, tenía ideas hermosas que todos podíamos admirar”.
Jackson también tenía esos ideales, agrega Boteach, pero se enfocó en volver a la cima al final de su vida, se enfocó en el dinero, la fama y las cosas materiales.
“Todos cometemos errores, todos somos falibles, pero hay una forma correcta de vivir la vida: la forma correcta para que una súper estrella viva su vida es que sea como Bono”, dice. “Simplemente hacer cosas por otras personas, así de sencillo”.
Pero es obvio que Jackson, a pesar del desorden al final de su vida, tocaba a las personas.
Dos Santos (la experta en cultura pop) señala que muchas personas volaron miles de kilómetros sólo para pararse afuera del tributo en el Staples Center de Los Ángeles. “Eso muestra el nivel de perdón y de voluntad de olvidar mucha de la controversia a su alrededor”, dice. “Él le hablaba al corazón de sus fans en una forma que no creo que yo haya visto antes o desde entonces”.
Una razón por la que le llegaba a tantas personas –dice John Covach, profesor de música en la Universidad de Rochester- es por su capacidad de traspasar los límites de género. Los Jackson 5 le gustaban tanto a los adolescentes amantes de la música popular como a los fanáticos de Motown; el trabajo como solista de Jackson, particularmente sus álbum Off the Wall y Thriller, no pueden ser encasillados como R&B.
Y después vinieron sus presentaciones, ya fueran en MTV –que se volvió popular en parte por los videos de Jackson- o en vivo.
“Jackson usó su éxito para subir el nivel, no sólo en videos musicales, pero en producciones de conciertos: casi como llevar en gira a una obra de Broadway”, dice Covach.
Todo eso tuvo un efecto positivo en otro tipo de legado: lo que queda.
Después de la muerte de Jackson, las ventas de sus álbumes se dispararon. Él seguirá siendo una propiedad valiosa, dice Joe Maddalena, presidente de la firma de coleccionables Profiles in History (perfiles en la historia), que recuerda que la letra escrita a mano de Beat It, se vendió recientemente por 27,500 dólares, cerca de cinco veces más que los que el mismo Maddalena estimó que se habría vendido antes de la muerte de Jackson.
Él cree que la parafernalia de Jackson, como los atuendos en escenario, también se venderá muy bien.
Y un poco de notoriedad no hace daño, agrega. Después de todo, celebridades como Marilyn Monroe, Jim Morrison y Elvis Presley son grandes atracciones, a pesar de sus fallas.
De hecho, Elvis puede ser la más apta comparación a Jackson. Al final de su vida, Presley –con sobrepeso, drogadicto, una sombra de la gran estrella que fue- era una figura de burla. Después de su muerte, sin embargo, el Elvis burlado se desvaneció, y fue reemplazado por la figura vibrante y viril de los años 50 y 60.
El legado de Jackson ha tenido la misma transformación, y eso seguirá siendo así, dice el corresponsal jefe de Inside Edition y ex presentador de CNN Jim Moret.
“Antes de la muerte de Michael Jackson, y por los años desde su caso criminal, Michael Jackson fue, en muchas maneras, un hombre destrozado”, le dijo Moret a CNN. “Y era el objeto de bromas, era el chiste de los comediantes, era considerado como una vieja gloria, en muchas formas”.
“Su muerte lo catapultó al estatus de Elvis, en que ahora es una leyenda. Y probablemente se merecía ese estatus incluso cuando estaba vivo. Pero todos los aspectos de su vida que fueron cuestionables cuando estaba vivo, han casi sido desechados en su muerte”.
¿Será suficiente? ¿Será matizada la vida turbia de Michael Jackson hasta ser una simple historia de un hombre-niño carismático?
Eso se pregunta Taraborelli, el biógrafo de Jackson.
“Nos va a tomar un tiempo ponerlo en perspectiva”, dice. “Creo que va a tomar muchos años para que nosotros en realidad entendamos el impacto que Michael Jackson tuvo en nosotros. Porque no es una historia sencilla, ¿sabes?”.
'Michael quería que su legado fuera que la gente entendiera la difícil situación de los niños, el dolor de la negligencia en la infancia', dice Rabbi Shmuley Boteach, quien fue el consejero espiritual de Jackson hasta que la estrella pop terminó su relación en 2001.
Michael Jackson lo logró.
La estrella del pop, que murió hace tres años, fue un “artista innovador, un paquete completo a la manera que lo fueron los Beatles y Elvis”, dice Ashley Dos Santos, una experta en cultura pop y experta en mercadeo de la firma de relaciones públicas Crosby-Volmer International.
Ella elogia los éxitos del cantante –artista espectacular, pionero de los videos musicales- y confía en que un santuario de Jackson, como Graceland de Presley, eventualmente se hará realidad, con su legado siendo el placer de su música y sus presentaciones.
En vida, Michael Jackson era quienquiera que uno quería que fuera: humanitario, artista mediático, Rey del Pop. O: violador infantil acusado. Vieja gloria. Monstruo de talla mundial.
Con razón su legado es tan confuso. ¿Es acaso sobre la compasión? ¿Sobre el talento? ¿Sobre el dinero? ¿O sobre el circo oscuro que lo rodeó todo el tiempoo?
“Creo que cuando hablas de Michael Jackson y tratas de analizarlo, es como analizar le electricidad, ¿sabes? Existe, pero no tienes ni la más remota idea de cómo funciona”, le dijo a CNN J. Randy Taraborelli, biógrafo de Jackson
Tal vez es demasiado pronto. “Todavía estoy de luto”, le dijo a CNN Jermaine Jackson, un hermano.
Tal vez hay todavía muchas cosas que resolver. Neverland todavía está en el limbo, las relaciones familiares aún son tensas y el caso del doctor de Jackson, Conrad Murray, todavía está en proceso.
Y tal vez Michael Jackson siga siendo muy complejo. “¿Me contradigo? / Muy bien, entonces me contradigo / (yo soy grande, yo contengo multitudes)”, escribió Walt Whitman en Canción para mí mismo, y Jackson encaja en ese pasaje a cabalidad.
Boteach (el consejero espiritual), que admite sentirse decepcionado por la pérdida de la amistad de Jackson, todavía está desilusionado porque la estrella pop no trabajó más por las cosas que eran más grandes que él.
Boteach señala que John Lennon, a pesar de su vida pública que incluyó divorcio, cinismo y varios excesos de estrella del rock, todavía hoy es recordado por sus esperanzas por la paz y es conmemorado en una parte del Central Park en Nueva York llamado Strawberry Fields.
“Eso es una vida exitosa”, dice Boteach. “Entendimos que aparte de ser muy falible, tenía ideas hermosas que todos podíamos admirar”.
Jackson también tenía esos ideales, agrega Boteach, pero se enfocó en volver a la cima al final de su vida, se enfocó en el dinero, la fama y las cosas materiales.
“Todos cometemos errores, todos somos falibles, pero hay una forma correcta de vivir la vida: la forma correcta para que una súper estrella viva su vida es que sea como Bono”, dice. “Simplemente hacer cosas por otras personas, así de sencillo”.
Pero es obvio que Jackson, a pesar del desorden al final de su vida, tocaba a las personas.
Dos Santos (la experta en cultura pop) señala que muchas personas volaron miles de kilómetros sólo para pararse afuera del tributo en el Staples Center de Los Ángeles. “Eso muestra el nivel de perdón y de voluntad de olvidar mucha de la controversia a su alrededor”, dice. “Él le hablaba al corazón de sus fans en una forma que no creo que yo haya visto antes o desde entonces”.
Una razón por la que le llegaba a tantas personas –dice John Covach, profesor de música en la Universidad de Rochester- es por su capacidad de traspasar los límites de género. Los Jackson 5 le gustaban tanto a los adolescentes amantes de la música popular como a los fanáticos de Motown; el trabajo como solista de Jackson, particularmente sus álbum Off the Wall y Thriller, no pueden ser encasillados como R&B.
Y después vinieron sus presentaciones, ya fueran en MTV –que se volvió popular en parte por los videos de Jackson- o en vivo.
“Jackson usó su éxito para subir el nivel, no sólo en videos musicales, pero en producciones de conciertos: casi como llevar en gira a una obra de Broadway”, dice Covach.
Todo eso tuvo un efecto positivo en otro tipo de legado: lo que queda.
Después de la muerte de Jackson, las ventas de sus álbumes se dispararon. Él seguirá siendo una propiedad valiosa, dice Joe Maddalena, presidente de la firma de coleccionables Profiles in History (perfiles en la historia), que recuerda que la letra escrita a mano de Beat It, se vendió recientemente por 27,500 dólares, cerca de cinco veces más que los que el mismo Maddalena estimó que se habría vendido antes de la muerte de Jackson.
Él cree que la parafernalia de Jackson, como los atuendos en escenario, también se venderá muy bien.
Y un poco de notoriedad no hace daño, agrega. Después de todo, celebridades como Marilyn Monroe, Jim Morrison y Elvis Presley son grandes atracciones, a pesar de sus fallas.
De hecho, Elvis puede ser la más apta comparación a Jackson. Al final de su vida, Presley –con sobrepeso, drogadicto, una sombra de la gran estrella que fue- era una figura de burla. Después de su muerte, sin embargo, el Elvis burlado se desvaneció, y fue reemplazado por la figura vibrante y viril de los años 50 y 60.
El legado de Jackson ha tenido la misma transformación, y eso seguirá siendo así, dice el corresponsal jefe de Inside Edition y ex presentador de CNN Jim Moret.
“Antes de la muerte de Michael Jackson, y por los años desde su caso criminal, Michael Jackson fue, en muchas maneras, un hombre destrozado”, le dijo Moret a CNN. “Y era el objeto de bromas, era el chiste de los comediantes, era considerado como una vieja gloria, en muchas formas”.
“Su muerte lo catapultó al estatus de Elvis, en que ahora es una leyenda. Y probablemente se merecía ese estatus incluso cuando estaba vivo. Pero todos los aspectos de su vida que fueron cuestionables cuando estaba vivo, han casi sido desechados en su muerte”.
¿Será suficiente? ¿Será matizada la vida turbia de Michael Jackson hasta ser una simple historia de un hombre-niño carismático?
Eso se pregunta Taraborelli, el biógrafo de Jackson.
“Nos va a tomar un tiempo ponerlo en perspectiva”, dice. “Creo que va a tomar muchos años para que nosotros en realidad entendamos el impacto que Michael Jackson tuvo en nosotros. Porque no es una historia sencilla, ¿sabes?”.